miércoles, 31 de diciembre de 2014

ENTREVISTA A LA PENSADORA FEMINISTA SILVIA FEDERICI

Silvia Federici (Italia, 1942) es una pensadora y activista feminista, un referente intelectual por su análisis del capitalismo, el trabajo asalariado y reproductivo, siempre desde una perspectiva de género. Profesora en la Universidad de Hofstra de Nueva York, Federici fue una de las impulsoras de las campañas que en los años setenta comenzaron a reivindicar un salario para el empleo doméstico. “El trabajo doméstico no es un trabajo por amor, hay que desnaturalizarlo”, defiende. La escritora está de gira por España: allá donde ha estado las librerías y salas se han llenado para escucharla. Su último libro publicado en español es Revolución en punto cero. Trabajo doméstico, reproducción y luchas feministas, publicado por Traficantes de Sueños.





¿Es esta crisis económica una crisis también de igualdad?

Sí, es una crisis de igualdad y que amenaza especialmente a las mujeres. Hay muchas consecuencias de las crisis que impactan en las mujeres de forma particularmente intensa. Por un lado, los recortes de servicios públicos, de la sanidad, de la educación, de los cuidados, las guarderías… eso trae a las casas un montón de trabajo doméstico que todavía siguen haciendo mayoritariamente las mujeres. La mayoría de las mujeres trabajan fuera de casa pero siguen encargándose de este trabajo y tienen que absorber esta parte de tareas que antes eran públicas. Por otro lado, la crisis del empleo y del salario crea nuevas tensiones entre las mujeres y los hombres. Que las mujeres tengan más autonomía ha creado tensiones y un aumento de la violencia masculina. El hecho de que los hombres no tengan el poder económico y al mismo tiempo las mujeres reivindican una mayor autonomía ha creado formas de violencia masculina contra las mujeres que se pueden ver en todo el mundo.

¿En qué momento diría que estamos entonces?

Estamos en un periodo en el cual se está desarrollando un nuevo tipo de patriarcado en el cual las mujeres no son solo amas de casa, pero en el que los valores y las estructuras sociales tradicionales aún no han sido cambiadas. Por ejemplo, hoy muchas mujeres trabajan fuera de la casa, muchas veces en condiciones precarias, lo que supone una pequeña fuente de mayor autonomía. Sin embargo, los lugares de trabajo asalariado no han sido cambiados, por tanto, ese trabajo asalariado significa adaptarse a un régimen que está construido pensado en el trabajo tradicional masculino: las horas de trabajo no son flexibles, los centros de trabajo no han incluido lugares para el cuidado, como guarderías, y no se ha pensado formas para que hombres y mujeres concilien producción y reproducción. Es un nuevo patriarcado en el que las mujeres deben ser dos cosas: productoras y reproductoras al mismo tiempo, una espiral que acaba consumiendo toda la vida de las mujeres.

De hecho, usted dice que se ha identificado la emancipación de las mujeres con el acceso al trabajo asalariado y que eso le parece un error, ¿lo es?

Es un engaño del que hoy podemos darnos cuenta. La ilusión de que el trabajo asalariado podía liberar a las mujeres no se ha producido. El feminismo de los años 70 no podía imaginar que las mujeres estaban entrando al trabajo asalariado en el momento justo en el que éste se estaba convirtiendo en un terreno de crisis. Pero es que, en general, el trabajo asalariado no ha liberado nunca a nadie. La idea de la liberación es alcanzar la igualdad de oportunidades con los hombres, pero ha estado basada en un malentendido fundamental sobre el papel del trabajo asalariado en el capitalismo. Ahora vemos que esas esperanzas de transformación completa eran en vano. Al mismo tiempo sí vemos que muchas mujeres han conseguido más autonomía a través del trabajo asalariado, pero más autonomía respecto de los hombres no respecto del capital. Es algo que ha permitido vivir por su cuenta a muchas mujeres o bien que tuvieran un trabajo, mientras su pareja no lo tenía. De alguna forma esto ha cambiado las dinámicas en los hogares, pero en general no ha cambiado las relaciones entre hombres y mujeres. Y, muy importante, eso no ha cambiado las relaciones entre mujeres y capitalismo: porque ahora las mujeres tienen dos trabajos y aún menos tiempo para, por ejemplo, luchar, participar en movimientos sociales o políticos.

Es también muy crítica con organismos internacionales como el FMI, el Banco Mundial o la ONU. Algunos de ellos publican informes animando a la participación femenina en el mercado laboral, mientras alientan medidas de recorte que perjudican la igualdad y la vida de las mujeres…

Sí y esto es fundamental. Es un error no ver el tipo de planificación capitalista que se está desarrollando dentro del proyecto de globalización. Hubo una intervención masiva en la agenda y en las políticas feministas con el objetivo de usar el feminismo para promover el neoliberalismo y para contrarrestar el potencial subversivo que tenía el movimiento de mujeres en términos, por ejemplo, de lucha contra la división sexual del trabajo y contra todos los mecanismos de explotación. Por un lado, el trabajo de la ONU fue redefinir la agenda feminista y creo que fueron bastante efectivos. A través de  varias conferencias mundiales, por ejemplo, se presentaban así misma como la representación de las mujeres del mundo y de lo que es o no el feminismo. Por otro lado, su otro objetivo era ‘educar’ a los gobiernos del mundo en que algo tenía que cambiar en la legislación laboral para permitir la entrada de las mujeres en el trabajo asalariado.

¿Cómo salir entonces de esa trampa, cómo conseguir reivindicar la igualdad sin caer en esas trampas? Porque, por ejemplo, usted rechaza que las mujeres se incorporen en igualdad a los Ejércitos.

No a las mujeres en el Ejército, de ninguna manera. Hay que tener en cuenta que los hombres también son explotados. Entonces, si decimos simplemente que queremos la igualdad con los hombres estamos diciendo que queremos tener la misma explotación que los hombres tienen. La igualdad es un término que congela el feminismo: por supuesto que en un sentido general no podemos estar en contra de la igualdad, pero en otro sentido decir solo que luchamos por la igualdad es decir que queremos la explotación capitalista que sufren los hombres. Creo que lo podemos hacer mejor que eso, hay que aspirar a transformar el modelo entero, porque los hombres tampoco tienen una situación ideal, los hombres también deben ser liberados, porque son sujetos de un proceso de explotación. Por eso no a las mujeres en el ejército, porque no a la guerra, no a la participación en ninguna organización que nos comprometa a matar a otras mujeres, a otros hombres en otros países con el objetivo de controlar los recursos del mundo. La lucha feminista debería decir en ese sentido que los hombres deberían ser iguales a las mujeres, que no haya hombres en los ejércitos, es decir, no a los ejércitos y no a las guerras.

¿Y cómo salir de la trampa en el caso del trabajo asalariado?

Esto es diferente porque en muchos casos el trabajo asalariado es la única forma en la que podamos ser autónomas y no estamos en la posición de decir no al empleo. La cuestión es considerar el trabajo asalariado como una estrategia más para la liberación, no como la gran estrategia para liberarnos. Por ejemplo, en EEUU la cuestión del trabajo reproductivo no se tiene en cuenta para nada e incluso cuando las mujeres luchan por liberarse de las tareas de cuidado eso solo se tiene en cuenta como una forma de que ellas puedan dedicar más tiempo al trabajo fuera de casa. El capitalismo devalúa la reproducción, y eso significa que devalúa nuestras vidas para continuar devaluando la producción de trabajadores. Es un asunto fundamental que no se está teniendo en cuenta. Así que no se trata de decir no al trabajo asalariado sino de decir que el trabajo asalariado no es la fórmula mágica para liberar a las mujeres. Las mujeres no están afuera de la clase trabajadora, la lucha feminista debe estar totalmente imbricada en la lucha trabajadora.

Entonces, ¿qué más estrategias se pueden seguir para conseguir esa liberación?

El trabajo que la mayoría de mujeres hacen en el mundo, que es el trabajo reproductivo y doméstico, es ignorado. Y ese trabajo es la base del capitalismo porque es la forma en la que se reproducen los trabajadores. El trabajo de cuidados no es un trabajo por amor, es un trabajo para producir a los trabajadores para el capital y es un tema central. Si no hay reproducción, no hay producción. Si ese trabajo que hacen las mujeres en las casas es el principio de todo lo demás: si las mujeres paran, todo para; si el trabajo doméstico para, todo lo demás para. Por eso el capitalismo tiene que devaluar este trabajo constantemente para sobrevivir: ¿por qué ese trabajo no está pagado si mantiene nuestras vidas en marcha? La corriente de la que yo provengo vimos que si el capitalismo tuviera que pagar por este trabajo no podría seguir acumulando bienes. Y al menos que lidiemos con este asunto no produciremos ningún cambio en ningún otra plano.

¿Defiende el salario para el trabajo doméstico?

Sí. Muchas feministas nos acusan de institucionalizar a las mujeres en casa porque entienden que esta demanda es una forma de congelar a las mujeres en los hogares, pero es exactamente lo contrario, es la forma en que podemos liberarnos. Porque si este trabajo es considerado como tal los hombres también podrán hacerlo. El salario sería para el trabajo, no para las mujeres.

Sí, pero aún hoy son las mujeres las que hacen mayoritariamente ese trabajo, esa sigue siendo la tendencia a pesar de que ha habido otros cambios, ¿qué haría cambiar esa inercia?

La tendencia es esa porque la ausencia de salario ha naturalizado la explotación. ¿Te imaginas que los hombres hubieran hecho un trabajo industrial gratis durante dos años porque es lo propio de los hombres? Estaría totalmente naturalizado, igual que lo está el trabajo doméstico, que está ligado a la feminidad y a lo que se considera propio de las mujeres. En una sociedad conformada para las relaciones monetarias, la falta de salario ha transformado una forma de explotación en una actividad natural, por eso decimos que es importante desnaturalizarla.

¿Y la forma de desnaturalizarla es precisamente mediante un salario?

Sí, es un primer paso para hacerlo. Pero nunca vemos el salario como un fin, sino como un medio, un instrumento para empezar la reivindicación. Ya solo pedir un salario tiene el poder de revelar toda un área de explotación, de sacar a la luz que esto es un trabajo propiamente dicho, y que es esencial para el capitalismo, que ha acumulado riqueza gracias a ello.

¿No se corre el riesgo de perpetuar así la división sexual del trabajo?

No, es una forma de romperla. Se puede demostrar que la división sexual del trabajo está construida sobre la diferencia salario-no salario.

Sin embargo, en muchos países como España el trabajo doméstico ya está reconocido como tal (no con todos los derechos) y aún así ese trabajo sigue siendo femenino mayoritariamente, es decir, que esté remunerado no ha hecho que los hombres se incorporen a esos empleos. ¿Por qué pensar entonces que pagar por las tareas del hogar hará que los hombres se incorporen a ese área?

En una situación en la que el trabajo doméstico no es reconocido como trabajo y millones de mujeres lo hacen gratis en todo el mundo, las mujeres que lo hacen por dinero están en una situación de debilidad, de no poder negociar mejores condiciones. Yo espero que se construya un nuevo movimiento feminista que una a las mujeres que hacen trabajo doméstico pagado y a las que lo hacen no pagado. Empezar una lucha sobre qué significa este trabajo, reivindicar nuevos recursos al servicio de este trabajo y proponer nuevas formas de organización. Este trabajo se hace separadas las unas de las otras y hace falta unión, nuevas formas de cooperación que nos permitan unir nuestras fuerzas para contestar esta devaluación del trabajo doméstico. La conexión entre mujeres y trabajo doméstico es muy fuerte y no será fácil, pero creo que sí se podrían conseguir cosas. La reivindicación del salario para el trabajo doméstico ha sido muy liberadora porque muchas mujeres podían comprender así que lo que hacían era trabajo y era explotación, y no algo natural.


jueves, 20 de noviembre de 2014

INFORME URGENT SOBRE LA POBRESA INFANTIL A TERRASSA

Avui 20 de novembre se celebra a tot el món el dia internacional de la infància. Enguany es commemora el 25è aniversari de la Convenció dels Drets de la Infància, que van ser proclamats per l’ONU, i que consolida que els infants són ciutadans amb drets i deures.
Sabem però que avui dia, i cada cop més, la pobresa va en augment, i que els nens i nenes d’arreu del món, degut a ser el col·lectiu més vulnerable, són els més damnificats. També passa això a Terrassa. L’Observatori dels Drets Socials vol denunciar en un dia com avui aquest alarmant augment de la pobresa infantil a Terrassa i a tota la societat en general. Ho fa a través d’un informe amb dades contundents: un de cada quatre menors catalans està en risc de pobresa, Catalunya per sobre de la mitjana europea en risc de pobresa infantil, o que existeixen a l’Estat Espanyol 714.000 famílies amb nens on tots els membres es troben a l’atur. Citem íntegrament aquest informe exhaustiu de l’OBDST, el qual conté a més demandes adreçades a l’Ajuntament de Terrassa, per tal que incrementi els esforços per evitar aquest drama de la pobresa infantil, com ara actuar a través de plans integrals i no amb mesures aïllades, com ara aules obertes a l’estiu, bancs d’aliments o ajudes puntuals de mecenes esportius.


L’OBSERVATORI DELS DRETS SOCIALS DE TERRASSA DENUNCIA 
L’ALARMANT AUGMENT DE LA POBRESA INFANTIL A TERRASSA I A LA SOCIETAT

Els professionals i ciutadans i ciutadanes de l’OBDST vol denunciar davant les Administracions i els poders econòmics de la ciutat :

  1. UN DE CADA QUATRE MENORS EN RISC DE POBRESA
El 26,4% dels catalans menors de 16 anys es troba en risc de pobresa, un percentatge 8,8 punts superior al que es va registrar l’any 2008. Així ho recull l’Estadística de distribució personal de la renda i de risc a la pobresa de l’IDESCAT.

  1. LES DADES DE RISC DE POBRESA INFANTIL MÉS ALTES D’EUROPA
Tot i que la pobresa infantil està augmentant a tot Europa, els percentatges de risc de pobresa infantil difereixen molt entre països. Mentre que a Dinamarca o Finlàndia se situen sobre el 10%, a Espanya, Grècia o Itàlia se situen per sobre del 25%. Així ho afirma un informe de la Comissió Europea

  1. EL RISC DE POBRESA INFANTIL S’HA INCREMENTAT EN 8,8 PUNTS RESPECTE 2008
Tots els indicadors existents mostren un important increment de la pobresa infantil des de l’inici de la crisi. D’acord amb les dades de l’IDESCAT la taxa de risc de pobresa infantil va ser del 26,4% l’any 2011, 8,8 punts més que la de l’any 2008.

  1. L’ESTAT ESPANYOL ÉS EL PAÍS AMB MÉS DESIGUALTAT DE L’EUROZONA
L’anomenat coeficient de GINI serveix per a mesurar el grau de desigualtat d’un país. Pren valors de 0 a 100, on 0 és màxima igualtat i 100 màxima desigualtat. L’estat espanyol es troba actualment al 34, la dada més alta des de que es recullen registres (l’any 2000). La dada només és superada per Letònia, que obté un 35,2. 

  1. 13,7% MENORS DE 18 ANYS EN LLARS AMB NIVELL DE POBRESA ALTA
L’alt nivell de pobresa fa referència als infants que viuen en una llar amb uns ingressos per sota del 40% de la mediana. L’any 2010 els infants en aquesta situació representaven el 13,7% del total. La dada s’ha incrementat en més de 4 punts percentuals des de 2008 i és el més elevat de la Unió Europea després de Romania i Bulgària. (Estudi UNICEF)

  1. 714.000 FAMÍLIES AMB NENS I TOTS ELS ADULTS A L’ATUR
Un dels grans problemes són aquelles famílies amb nens i amb tots els seus membres a l’atur. L’any 2007 hi havia 324.000 llars en aquesta situació, una dada que ha arribat a 714.000 llars el 2010, produint-se un increment d’un 120%. (Estudi UNICEF)

  1. A CADA NEN LI CORRESPONEN 15.570€ DE DEUTE PÚBLIC
Segons UNICEF gran part del deute públic de l’estat espanyol constitueix una “hipoteca social” que els adults estan traslladant als infants.

  1. A TERRASSA L’AJUNTAMENT I LA GENERALITAT NO FACLITEN XIFRES OFICIALS
NOMÉS TENIM  LES XIFRES QUE DONA LA ONG CÁRITAS,  QUAN FA PÚBLIC  EN UN INFORME SEU, QUE A LA DIÓCESIS DE TERRASSA, HA TINGUT QUE FER UN GRAN  ESFORÇ  DURANT ELS ÚLTIMS MESOS AMB UN INCREMENT DEL 12,3 % DE LAS PERSONES USUÀRIES RESPECTO  L’ANY ANTERIOR.
DURANT EL 2013 VAN ATENDRE A MÉS DE 70.000 PERSONES A TERRASSA. I A MÉS DE 300.000 PERSONES DES DEL 2009.

A la província de Barcelona, segons un informe de FEDAIA de 2013, hi havia un 24% de pobresa infantil.

COM ES MANIFESTA LA POBRESA ENTRE ELS INFANTS, JOVES I ADOLESCENTS?

  • Malnutrició i desnutrició
  • Mancances de vestuari i de material escolar
  • Mancances higièniques i d'espais propis
  • Problemes de salut mental
  • Problemes de visió i falta d'higiene bucodental
  • Problemes de creixement
  • Dificultats d’aprenentatge, baix rendiment, absentisme escolar
  • Major risc de fracàs escolar i abandó
  • Problemes d'accés a programes de reforç escolar i de formació pre-laboral
  • Dificultats d'accés a activitats lúdiques i esportives
  • Menys possibilitats per a accedir a les noves tecnologies
  • Dificultats per a accedir al món laboral
  • Problemes d'emancipació
  • Problemes de relació amb l'entorn

COM ES MANIFESTA LA POBRESA ENTRE LES FAMÍLIES?

  • Problemes per a accedir a una dieta equilibrada
  • Dificultats d'accés a un habitatge digne
  • Atur crònic i precarietat laboral
  • Dificultats dels pares per a donar suport als seus fills en la formació acadèmica
  • Dificultats d’accés a prestacions de salut no garantides
  • Falta de recursos per a adquirir articles de primera necessitat.
  • Problemes d'accés a activitats lúdiques en família
  • Més estrès i malalties mentals
  • Majors problemes de desestructuració familiar

QUINES SITUACIONS S’HAN AGREUJAT AMB LA CRISI?

  • Més infants que passen fam.
  • Famílies sense llar
  • Habitatges que no compten amb els serveis bàsics o que són insalubres
  • Famílies que subsisteixen amb la renda mínima d'inserció (PIRMI) o sense cap prestació
  • Greu augment de l'atur i de la precarietat laboral
  • Augment dels problemes de desestructuració familiar
  • Escassetat de recursos en les escoles
  • Problemes d'accés a la salut i a l'educació
  • Augment de les malalties mentals i psicosomàtiques
  • Disminució del pressupost de salut mental i de suport pedagògic
  • Menys suport als infants tutelats.

QUINES SON LES CAUSES MÉS IMPORTANTS D’AQUESTA POBRESA INFANTIL? 

1)    La situació econòmica dels nens depèn directament de la situació econòmica dels seus pares. CAL ANALITZAR DONCS LA POBRESA DELS PARES I AIXÒ S’OBLIDA MOLT
2)    Augmenta l’escassetat de recursos, en general. Degut en gran part a l’alt índex d’atur i de la precarietat laboral. Situació que s’accentua als països del Sud d’Europa on l’Economia està més malmesa.
3)    Cal situar al punt de mira, les diferents reformes laborals ( PP-PSOE), que s’han realitzar durant els últims anys i que han provocat la disminució dels salaris i l’augment de la precarietat laboral (contractes escombraria)( flexiseguretat).
4)    El PIB de l’estat espanyol s’ha disminuït en un 3%, a l’hora que les grans fortunes augmenten (desigualtats molt severes)
5)    Espanya i Catalunya tenen els pressupostos més baixos de la Unió Europea  (UE-15) en quan a despesa social per habitant (escoles per infants, serveis domiciliaris, habitatge social, programes de prevenció de l’exclusió social, prestacions, programes d’integració formació...)
6)    La gran dificultat de les dones i els joves de poder accedir al mercat laboral, afecta molt directament a la pobresa de les famílies
7)    A l’estat espanyol només hi ha un treballador de cada 10 treballant en serveis públics de l’estat del benestar ( a Suècia en tenen un per cada 4). Això ajudaria a eliminar l’atur i el benestar de les famílies
8)    Impacte directe de la manca de permisos de paternitat i maternitat en la pobresa infantil ( A Suècia el pare i la mare poden agafar un any de permís per cuidar els seus fills, cobrant el 80% del salari..). Aquí no es desenvolupa aquesta oportunitat..

QUE CAL FER PER ERRADICAR AQUESTA POBRESA INFANTIL?

L’article 3.1 de la Convenció de les Nacions Unides sobre els drets de l’infant estableix: “En totes les accions que concerneixen l’infant [...] la consideració principal ha de ser l’interès primordial de l’infant”. Ja la Declaració sobre els drets de l’infant de 1959 deia que “l’infant ha de gaudir d’una protecció especial i de les oportunitats per al seu desenvolupament [...], i aquesta consideració de l’interès superior de l’infant ha de ser la primordial”.
  
Les propostes que s’exposen a continuació pretenen situar l’infant en el centre de la planificació i la implantació de polítiques públiques, i proposar mesures perquè les adoptin els poders públics  ( LES NOSTRES ADMINISTRACIONS SIGUIN LA LOCAL, L’AUTONÒMICA O L’ESTATAL), amb la finalitat d’eradicar la pobresa infantil.

Per tant és urgent assegurar que no es vulnerin més i s’asseguri el compliment dels següents drets dels infants:
1)    Dret a un nivell de vida adequat
2)    Dret a l’educació
3)    Dret al lleure
4)    Dret a l’habitatge
5)    Dret a la salut

MESURES CONCRETES ( com les que demanava el Síndic de Greuges de Catalunya en el seu Informe:


  • Increment de la despesa social en polítiques adreçades a la infància
  • Desenvolupament d’una renda de suficiència econòmica garantida per als Infants (L’article 24.3 de l’Estatut d’autonomia de Catalunya de l’any 2006)
  •  Configuració d’un sistema integrat de prestacions econòmiques per combatre la pobresa infantil
  • Disseny de plans integrals contra la pobresa infantil
1.    En matèria d’ensenyament
2.    En matèria de lleure educatiu
3.    En matèria de suport a les famílies en la criança dels fills i de conciliació de la vida laboral i familiar
4.    En matèria de protecció de la infància
5.    En matèria de salut
6.    En matèria residencial
7.    En matèria de participació política


QUE DEMANEM A L'AJUNTAMENT DE TERRASSA ?

Cal destacar la importància que aquests plans integrals incorporin estratègies d’intervenció primerenca, però també d’acompanyament dels infants en situació de pobresa al llarg del seu cicle vital, i també que desenvolupin actuacions amb un fort caràcter preventiu.

No n’hi ha prou amb mesures aïllades (aules obertes a l’estiu, bancs d’aliments o ajudes puntuals de mecenes esportius o d’altres), cal que defineixin amb precisió les competències en matèria de prevenció de situacions de pobresa infantil, amb la concreció de les funcions i de les institucions que les han de portar a terme i amb l’establiment del tipus de serveis o de programes adequats per complementar les funcions parentals de les famílies.

Que facin una reserva pressupostària suficient per complir la funció preventiva en la intervenció social: de prevenció primària i secundària des de les administracions locals. ( a Terrassa hi ha moltes economies privilegiades i empreses molt poderoses i per tant, és l’hora de redistribuir la riquesa..)

I, en darrer terme, també cal destacar la importància que aquests plans integrals desenvolupin estratègies per promoure la coordinació entre els diferents agents socials implicats, públics i privats, en la lluita contra la pobresa infantil. El foment del treball en xarxa entre serveis socials, educatius, sanitaris, etc. o la vertebració del teixit associatiu del territori i la implicació en la formulació i la implantació de polítiques, per exemple, són fonamentals per combatre la pobresa infantil en els diferents territoris.

Observatori dels Drets Socials de Terrassa
20 de novembre de 2014




miércoles, 12 de noviembre de 2014

DE PASAREL·LES, SANITAT, DRETS, ETICA I DEMOCRÀCIA





Ja portem unes setmanes embolicats en la polèmica sobre un pretès projecte que l’empresa privada més gran i antiga de Terrassa (114 anys i més de 3700 treballadors), Mutua de Terrassa, vol executar amb la sospitosa complicitat del govern del nostre Ajuntament .

Es tracta de la construcció d’una passarel·la que connectaria, per sota del pont que uneix el Passeig amb l’Avinguda Jacquard, les instal·lacions de l’hospital de Mutua amb el futur edifici de consultes externes a construir en el pàrquing de la nova estació del Metro del Vallès .Aquesta operació està pressupostada, com a mínim, en 3.000.000 d'euros.

Vull defugir aquí de detalls complexes sobre la seva discutible legalitat, oportunitat, eficàcia o eficiència. En tot cas, això només serien cortines de fum per tapar el veritable problema. I ho dic perquè tot es pot resumir en un nou atac a l’ètica i a la dignitat de les persones. Com es pot pretendre plantejar una obra d’aquest tipus, des d’una empresa privada que té l’obligació de donar un servei de sanitat pública (se li transfereix anualment més de 180 milions dels pressupostos públics de la Generalitat) perquè doni uns serveis de qualitat màxima i, en canvi, el que fa es rebaixar el 30% del sou dels seus treballadors i treballadores (a partir d’un ERE presentat) i anar restant eficàcia i eficiència en l’atenció que dona a les persones (les llistes d’espera estan per sobra de la mitjana de Catalunya… i molts serveis es deterioren dia a dia).

Ara bé, en el mateix hospital, té un servei de medicina privada, que pagant  millora els serveis ràpidament. O bé compra amb els diners que retalla l’antic Hotel Vapor Gran per instal·lar una residencia privada de la 3a edat. És intolerable que això passi i que cap administració ni mogui ni un dit, ni digui un mot, ni mostri intenció d'actuar en defensa dels drets fonamentals de les persones, ni de situar quines són les prioritats reals de despesa en aquests moments tan durs, on moltíssima gent ho està passant molt malament, és indigne!

Per no parlar de la manca de transparència: com es gasten aquests 180 milions que son dels ciutadans?, qui els controla? I qui exigeix o demana comptes a aquest petit imperi que s’estén a més de 9 comarques? Hospitals, clíniques, residencies, assegurances, serveis a empreses, immobiliàries, centres d’alta tecnologia, formació... Mútua no para de créixer, des de fa anys.

Des d’aquí vull aprofitar per demanar que no cal que es rentin la cara amb acords amb Nacions Unides, per exemple, o amb banderes a la façana.. i sobretot que no diguin mentides, que no som idiotes, senyor gerent de Mutua, com pot dir que són una societat de beneficència en un mitjà local? Això es insultant!

També es bo recordar lo que va dir sobre Mutua (la memòria no s'ha de perdre..),  Trias, flamant burgès i alcalde de Barcelona, un dia, ja fa més de 20 anys,  quan era Conseller de Sanitat de la Generalitat. Se’l va interrogar, en una reunió amb associacions sanitàries, sobre Mutua, i va respondre amb contundència, que... això no tocava ( us sona aquesta maleïda lletania? ) i que Mutua era un tema a part. Perquè va contestar així? Doncs molt senzill, Mutua a estat per als governs de CIU, PSC i Tripartit, l’eix fonamental per desenvolupar el model català de privatització progressiva de la sanitat, arreu del país  (amb els beneficis que això suposa per a molta gent…).

Arribats a aquest punt és bo i sa que, ens el moments en que vivim —de canvi i transformació— s’acabi amb aquesta situació de privilegis i de tractament privilegiat d’empreses com Mutua (que per desgracia no és l’única a la nostra ciutat), per dignitat i respecte als drets socials i fonamentals que les persones tenen.

Prou ja d’una sistema d’estatus neofeudal a Terrassa, on els poders econòmics fan i desfan tot el que volen, i on  el poder polític o no fa res o ja li esta “bé”.

                                                                                              Joan Tamayo Sala
Advocat i membre de l’Observatori 
dels Drets Socials de Terrassa

                                        

viernes, 31 de octubre de 2014

TOMÁS IBÁÑEZ: "LA TOMA DEL PODER ES EL ESPEJISMO QUE DESVIRTÚA Y ESTERILIZA LAS POLÍTICAS RADICALES"




Siempre parece lo contrario, pero las ideas anarquistas mantienen el atractivo y se sitúan en el centro del debate. Aunque muchos lo quieran dar muerto, el anarquismo ya sea como ideología o como pauta de comportamiento está presente en muchos espacios.

Sobre la importancia que juega y puede jugar el anarquismo en al actualidad que nos rodea nos habla Tomás Ibañez en su nuevo libro, Anarquismo es movimiento. Este zaragozano nacido en 1944 tiene una amplia trayectoria militante en el movimiento libertario. Participante desde el periodo de la clandestinidad en la lucha libertaria, es autor de numerosos textos sobre la actualidad del anarquismo y es integrante de los equipos de redacción de revistas como Libre Pensamiento o Réfractions dedicadas al pensamiento libertario

¿Qué pretendes aportar con la obra al pensamiento anarquista?

Mi propósito no ha sido el de enriquecer el pensamiento anarquista con aportaciones y formulaciones innovadoras. No lo ha sido porque estoy convencido que es a partir de las prácticas de lucha contra los actuales dispositivos de dominación como se puede generar ese tipo de propuestas, y, hoy estoy demasiado alejado de la cotidianidad de las luchas para poder contribuir a la construcción colectiva de nuevas aportaciones.

Mi única pretensión pasa por ofrecer una visión de la situación actual del anarquismo que ayude a reflexionar tanto sobre el porqué de esa situación, como sobre las propias características del anarquismo.

Ahora bien, el libro no tiene una finalidad puramente expositiva y reflexiva, sino que busca producir efectos prácticos impulsando determinas formas de entender el anarquismo y de fortalecer su incidencia social. Si, como lo pretendo, el anarquismo se encuentra en la imposibilidad de no ser cambiante, es obvio que no hay que obstaculizar su renovación, y si es cierto que se fragua en las luchas contra la dominación entonces también es obvio que hay que impulsar su presencia en los diversos escenarios de esas luchas, aunque desborden los contornos del movimiento anarquista instituido. En este sentido, mi libro quiere ser una herramienta que sirva para acrecentar la apertura y la combatividad del anarquismo contemporáneo.

Neoanarquismo y postanarquismo son dos términos que desarrollas en el libro. Palabras y principios que se enmarcan en la cultura de la postmodernidad. Aunque hay debates al respecto sobre la propia postmodernidad ¿qué aporta ésta al anarquismo?

El término postmodernidad se ha ganado a pulso, todo hay que decirlo, tan pésima fama que necesitaríamos bastante tiempo para explorar sus diversos significados, algunos de los cuales, también hay que decirlo, son muy interesantes. Pero en aras a la brevedad te diría que, con relación al anarquismo, la posmodernidad aporta, simultáneamente, elementos positivos y negativos, tanto si la consideramos en su vertiente discursiva, o ideológica, como si la entendemos en tanto que una nueva época que se está perfilando. Época y discurso están, por supuesto, íntimamente relacionados, por no decir que son dos aspectos de una misma realidad.

El discurso posmoderno le aporta valiosos elementos para cuestionar un conjunto de creencias acríticamente heredadas de la Ilustración, pero, al mismo tiempo, le sitúa en la difícil tesitura de tener que diagnosticar y contrarrestar las implicaciones liberticidas de esa nueva ideología.

Considerándola ahora no como discurso sino como una nueva época y un nuevo modelo de sociedad que se encuentra en gestación, me parece que, por una parte, dificulta los planteamientos anarquistas porque diseña instrumentalizaciones de la libertad que dificultan su ejercicio, pero, por otra parte, abre al anarquismo nuevos escenarios de lucha donde intervenir y donde forjar nuevas armas para contrarrestar sus dispositivos de poder. Es más, el anarquismo puede utilizar para sus luchas algunas de los instrumentos propios de esa nueva época.

En tanto que la postmodernidad es la nueva cara que va tomando la dominación, el anarquismo no puede sino enfrentarse a ella, pero en tanto que la postmodernidad desmantela las bases legitimadoras de la anterior cara de la dominación, el anarquismo no puede renunciar a apropiarse los resultados de ese trabajo de demolición.

¿Hay diferencias entre el anarquismo clásico, protagonista de importantes luchas por la emancipación social, y el anarquismo actual? ¿Qué le debe el segundo al primero?

Por supuesto, hay diferencias y semejanzas, aunque sin duda son muchas más las semejanzas que las diferencias. Ahora bien, el anarquismo solo tiene relevancia si está firmemente anclado en las condiciones sociales propias de cada momento histórico, de cada presente, por así decirlo, y si está profundamente involucrado en la conflictividad social vigente. No cabe duda que el contexto social actual ya no es el mismo que el contexto donde hundía sus raíces el anarquismo clásico, y también es obvio que la conflictividad social ha cambiado en algunos de sus aspectos. Por lo tanto mal andaría el anarquismo actual si fuese idéntico al anarquismo clásico, por la sencilla razón que no conseguiría entroncar con la realidad social del momento presente.

Como ejemplo de las diferencias que median entre ambas expresiones anarquistas basta con pensar en las características que revestía la Revolución en el antiguo imaginario anarquista y a las que presenta en el imaginario actual. La Revolución ya no es un evento situado en un futuro más o menos lejano, que nos espera al final del camino recorrido por las luchas, sino que está firmemente anclada en el presente y se vive como una dimensión que es constitutiva de la propia acción subversiva.

Como es lógico, si los dispositivos de dominación van cambiando, también cambian las formas de lucha, y como son estas las que definen el anarquismo en cada momento, es obvio que mantener la actualidad del anarquismo implica necesariamente su constante renovación.

Eso no implica discontinuidad entre las prácticas anarquistas de ayer y las de hoy. El anarquismo actual se nutre, sin fetichismos, del legado de experiencias de lucha y de construcción de realidades alternativas acumulado por el anarquismo de antaño.

Resurgimiento y renovación son dos palabras muy utilizadas en tu libro. Sin embargo, en principio, son dos cosas distintas. ¿A cuál de las dos palabras se ajustaría más el anarquismo actualmente?

Tienes razón, son dos cosas distintas, sin embargo lo que argumento en el libro es que, tratándose de anarquismo, esa distinción se difumina y esas dos cosas están íntimamente entrelazadas. No hay que olvidar que, como dicen los clásicos del anarquismo, este se caracteriza por unir indisolublemente “la idea” y “la acción”, la teoría y la práctica, la idea nace en un contexto de acción y revierte sobre la acción. Esto significa que, como todas las prácticas están incardinadas en un contexto sociohistórico, estas van cambiando con los inevitables cambios de ese contexto y eso hace que la idea también se renueve.

Si el anarquismo resurge eso implica que se incrementa su presencia en las prácticas antagonistas y que, consecuentemente con lo que acabo de decir, esa mayor presencia conlleva un mayor efecto transformador del anarquismo. Obviamente los tempos del resurgimiento y de la renovación no son milimétricamente sincrónicos, eso hace que, a mi entender, hoy en día la renovación esté a la zaga del resurgimiento.

¿Qué hay de anarquismo en los nuevos movimientos sociales?

Sin duda alguna, encontramos en esos movimientos un modo de funcionamiento que evoca muy directamente los principios organizativos del anarquismo. Me refiero a la horizontalidad, al asamblearismo, al estricto control de la delegación cuando esta no se puede evitar, etc.

Ahora bien, todo esto se sitúa sobre un plano puramente formal, y parece más difícil discernir una relación con el anarquismo en el plano de los contenidos. Ciertamente, el anarquismo no se reduce a un modo de funcionamiento de los colectivos, y podemos imaginar hoy unos movimientos totalmente reformistas, simplemente ciudadanistas, o incluso reaccionarios, que adopten formas de organización horizontales, y modos de funcionamiento próximos a los que caracterizan al anarquismo.

Sin embargo, en algunos de los nuevos movimientos sociales también existen ciertas semejanzas con el anarquismo que van más allá de los aspectos puramente formales, y que atañen a los contenidos. Solo mencionaré unos pocos como, por ejemplo, el recurso a la acción directa, el compromiso con políticas prefigurativas, es decir, con formas de intervención política cuyos procedimientos y planteamientos conlleven los fines que pretenden alcanzar, hipersensibilidad frente a las manifestaciones del poder, suspicacia y rechazo hacia todas las formas de dirigismo y de autoritarismo, denuncia de las discriminaciones y de las desigualdades, etc.

A lo largo de libro, en muchas ocasiones, haces referencia a Mayo del 68. Allí también se empezó a hablar de “nueva izquierda” y de un resurgir del anarquismo. Sin embargo hubo cosas que no cuajaron. ¿Crees que en el momento actual, que parece de cambio, el anarquismo tiene mucho que decir?

Por supuesto. Hoy el anarquismo tiene mucho que decir porque el continuo desarrollo y la creciente sofisticación de los dispositivos de poder que proliferan por todos los ámbitos del tejido social y se insinúan en los intersticios más diminutos de la vida cotidiana, no solo sitúan la lucha contra el poder en un primer plano sino que legitiman el discurso anarquista que siempre le concedió una importancia privilegiada.

También tiene mucho que decir porque la voluntad de imprimir mayor efectividad a los movimientos sociales de base y asamblearios que van surgiendo más o menos espontáneamente por doquier, encarrila esos movimientos hacia unos derroteros que amenazan con desvirtuar su potencial subversivo. Ahí están Podemos o Guanyem como posibles ejemplos. Frente a esas derivas, la experiencia histórica acumulada por las luchas anarquistas articula un discurso, que no se debería desoír, contra las tentaciones parlamentaristas y contra la participación en los engranajes del poder político. La toma del poder es el espejismo que desvirtúa y esteriliza las políticas radicales.

La palabra anarquismo muchas veces ha sido mal utilizada. Por ejemplo. En EEUU existe el término “libertariano” o el “Libertarian Party”, que hablan de una desaparición del Estado o un Estado mínimo pero en términos económicos son ultraliberales. Son lo que se denominan “anarco-capitalistas”, que no deja de ser una contradicción in terminis. ¿Cómo afecta esto al anarquismo que siempre ha tenido una base transformadora hacia el socialismo?

Esto afecta, seguramente, a determinados sectores del capitalismo que pugnan por desarrollar planteamientos económicos y políticos ultra liberales, pero no afecta en lo más mínimo al anarquismo.

No lo afecta por la sencilla razón que se trata de orientaciones inconmensurables, pertenecientes a universos políticos totalmente ajenos el uno al otro y sin ningún punto de contacto. Por supuesto, nadie puede impedir que las palabras sean secuestradas para servir a propósitos estrambóticos, pero sí se puede denunciar el carácter estrambótico de esas apropiaciones indebidas y mostrar su inanidad.

Eso es bastante fácil cuando se trata del acoplamiento del término “anarco” a una serie de otros términos, que son a veces antitéticos, tal y como anarco-capitalismo, anarco-fascismo, u otros del mismo tipo, sin embargo la presencia de referencias a conceptos que son nucleares para el anarquismo, tales como anti-estatismo, o exigencia de libertad, parece complicar las cosas, pero eso no es así porque si los significantes son idénticos los significados nada tiene en común. Así, por ejemplo, el concepto anarquista de la libertad vincula de forma inseparable la libertad y la igualdad (libertad entre iguales) lo cual hace de la libertad un concepto incompatible con cualquier forma de capitalismo.

En España el movimiento libertario fue uno de los más dinámicos de la historia. Sus organismos y militantes no solo articularon movimientos sindicales y políticos sino que crearon una forma de vida distinta. La llamada “cultura libertaria”. En este momento de agitación social. ¿Ves posibilidades de crecimiento de un movimiento libertario similar al de los años 30? ¿En qué puntos consideras que se encuentra el anarcosindicalismo en la actualidad?

En un contexto político y social notablemente distinto resulta difícil imaginar cómo sería un movimiento libertario similar al de los años 30, ahora bien, estoy convencido que el movimiento libertario puede acercarse a las cuotas de influencia que conoció en aquellos años (salvo que la evolución de la sociedad hacia sistemas de dominación cada vez más sofisticados e invasivos, consiga eliminarlo del todo).

Ahora bien, es obvio que su fuerza ya no se concentrara en una clase trabajadora cuyas características distan mucho de las que la definían en los años treinta. En su forma clásica el anarcosindicalismo tiene en el contexto social actual un techo relativamente bajo que, sin ser despreciable, no le augura el lugar hegemónico que ocupo en los años treinta. Por mucho que pueda crecer al calor de la “crisis”, mi sentimiento es que no progresara mucho más arriba del punto en el que se sitúa en el momento actual.

Esto no significa que no sea útil contribuir a su desarrollo, pero atempera las expectativas de éxito que se puedan albergar. Ahora bien, el anarcosindicalismo está pugnando actualmente por renovar sus planteamientos en la línea de expandirse fuera del mundo del trabajo estrictamente definido, y de lograr una “hibridación” con los movimientos sociales. Si consigue progresar en esa vía puede alcanzar nuevas cuotas de desarrollo y deparar desagradables sorpresas a las instituciones que mantienen el orden establecido.